jueves, enero 26, 2006

Hoy…

… me siento como en el ojo del huracán.

Hay calma en mi vida y es por eso que en estos momentos quiero decir Gracias, muchas gracias.

Por que me siento en el ojo del huracán? porque a mi alrededor se torna gris, como todo un remolino y en mi vida hay cierta tranquilidad placentera y esperanzadora.

Y digo a mi alrededor con respecto a amigos, tengo amigos que tienen mínimo a un familiar en el hospital y digo mínimo porque hay unos que hasta 3 al mismo tiempo. Amigos que han dejado su trabajo para estar con su pariente en el duro paso de las quimioterapias. Amigos que han tenido truenes. Amigos que pasan por la pérdida de un familiar. Amigos que se sienten frustrados.

Me gustaria poder abarzar a cada uno, cobijarlos y tratar de darles una esperanza, un aliento; encontrar las palabras adecuadas para que se acurruquen en su corazón que sé que es dónde lleva el dolor más profundo.
Me gustaría ser su hombro.
Me gustaría ser un aliento de que las cosas mejoraran.
Me gustaría que supieran que estaré con ellos.
Me gustaría ser una sonrisa en un momento de tristeza.
Me gustaría poder tener la calma en un frasco y poder brindárselas a cada uno.
Tener un rayo de un nuevo amanecer y regarlo con la esperanza que ese día que empieza ha borrado toda esta angustía.
El calor que falta cuando recibieron esa mala noticia y poder regresárselos.
Me gustaría poder extender mi mano y acercarlos a esta calma que disfruto.

No sé cuánto dure este tiempo, pero si quisiera dejarlo por escrito para los malos momentos.

Una familia unida y sana, esa es la mejor de las bendiciones de este año.
Unos sobrinos que multiplican la palabra amor en mi corazón cada día.
Una madre que adoro, admiro y respeto. Mami no sabes cuanto te quiero y espero poder demostrártelo cada día. Eres mi razón de estar viva.
Un padre que me ha demostrado a luchar y seguir adelante.
Unos hermanos que cada uno en su mundo me demuestra el por que sonreir en estos días. Gracias, sin su apoyo no hubiera sonreído este año.
Cuñadas las quiero y me da gusto saber que cada día nuestros corazones están más cerca.

Y todo esto no fue mérito propio, tendría que darle gracias a estas mismas personas porque:
Dios me puso en el momento y tiempo indicados
Mi madre es tolerante y es una buena compañía
Mi padre está siempre ahí cuando marcó el teléfono.
Por que mis hermanos me enseñaron a tomar el toro por los cuernos
Mis sobrinos me brindan sonrisas y melodías hermosas con voces angelicales (Y preguntas curiosas y llenas de sabiduría natural)
Mis amigos me brindaron parte de su tiempo, regaños y silencios.

No sé cuánto dure pero se que en este momento estoy tranquila, cosa que hace mucho no experimentaba.

He dicho y espero no olvidar este momento pronto.

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